domingo, 30 de noviembre de 2008

Deja-vú (parte 2)

Parte uno, aquí

-------------------------------------------------------
Gentesimple. Capítulo 12, parte dos
-------------------------------------------------------

Hace casi tres años tenía a María en mis brazos. Recuerdo que ese día ella me pidió que nos escapáramos de clases para que pudiera llevarme a una vieja casa que tenían sus tíos fuera del puerto, donde nadie nos podría interrumpir. Quería aprovechar al máximo mis últimas cinco semanas con ella antes de que mi papá me enviara a esa estúpido colegio militar. Ambos estábamos nerviosos, aún así ella tuvo las agallas suficientes para iniciar aquella conversación.

- Tenía muchas ganas de estar contigo y ahora que hemos llegado a este punto no sé que pensarás de mi. Lamento haberte pedido esto...

- Esto sucedió muy repentinamente y entiendo si te estás arrepintiendo, no hay problema. Podemos volver a casa.

- No... No es eso. Sólo imaginé que si llegábamos a estar juntos algún día sería en otra situación sin tener que ocultárselo al mundo.

- No necesitamos al mundo. Tú eres mi mundo, todo lo que necesito ¿Es que acaso no sientes lo mismo?

- Si, y es por eso que no dejo de sentir todos estos remordimientos. Dios... Todos los malos momentos, la pena y el sufrimiento que te he hecho pasar. ¿Por qué no fuimos solamente amigos?

Justo en ese momento Dafne me despierta de mis recuerdos con la misma respuesta que le dí a María en ese entonces.

- Porque nos amamos... Te amo.

Una sensación electrizante recorre nuestros cuerpos desde los pies hasta la cabeza erizando toda nuestra piel. Las ansias y los nervios se han ido. Estamos unidos por primera vez. El deja-vu se ha completado.

Ya no hay marcha atrás.